Con motivo de la Navidad, mi hermana decora su casa con sus belenes del mundo y con manteles y pañitos elaborados por mi madre, tan bonitos como el rojo de la foto, de punto de Asís.
El color dominante es el rojo, en manteles, adornos y plantas, como la poinsettia o flor de Pascua.
Hoy os muestro más belenes del mundo, de la colección de mi hermana, pero en este caso de tamaño pequeño, como este tríptico de marfil, que compró en la feria de artesanía de Madrid, en Navidad, que ya va por su XXVII edición.
Tríptico de marfil, del misterio de Belén en el centro, y ángeles en los laterales |
Son tan pequeños que caben en una caja de cerillas, como éste de barro, que el compré en una tienda de Madrid de comercio justo, de Intermón-Oxfam, procedente de Hispanoamérica.
Otros caben en una nuez, cuya cáscara hace de portal de Belén; éste se lo trajo a mi hermana de Costa Rica su amiga Reme.
Portal de Belén en una nuez; Costa Rica |
En este belén traído de Argentina, por su amiga Juana, el establo es un tronquito de madera y las figuras de barro.
Belén, sobre un tronquito de madera, de Argentina |
En éste, el portal es una cajita de barro, que tiene la forma de una iglesia, con su campanario y su reloj. Es uno de los primeros de la colección, de los años 80.
Cajita de barro con forma de iglesia |
Este belén es de Perú, y está hecho para colgarse de algún sitio, como adorno.
Éste es un belén de cerámica, que funciona como imán.
El siguiente es una adaptación del ekeko boliviano, que es el dios de la abundancia en la mitología boliviana y del altiplano; el ekeko es un hombre gordito que va cargado de un montón de miniaturas que la gente quiere tener: una casa, dinero, ropa, un coche, dinero, etc. En este caso se trata de una mujer, cargada con multitud de cosas, pero tiene en brazos a su bebé.
En el la catedral de San Martiño de Orense, el obispado ha organizado una exposición de belenes del mundo, que se puede ver hasta el 7 de enero de 2015; los cien belenes han sido traídos, por misioneros orensanos. Aquí podéis ver las fotos de los belenes, que son todos muy auténticos, artesanales, hechos a mano con materias primas del lugar, y que reflejan las costumbres y tradiciones de los distintos países.
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